Isotrol es el líder tecnológico del consorcio que está desarrollando este proyecto. Lo conforman, a su vez, la Universidad de Jaén; las empresas Kaylon, Sol-ution y Atrebo; y el clúster OnTech Innovation. BigER pasa ahora a su segunda fase, en la que se crearán algoritmos capaces de detectar fallos en las instalaciones antes de que ocurran.
BigER está dando sus frutos. En la primera fase, el consorcio encargado del proyecto ha sentado las bases de la herramienta. Y en la siguiente etapa, se crearán algoritmos y técnicas de inteligencia artificial avanzados. En concreto, se analizará la predictibilidad de los fallos de los componentes de generación de las plantas renovables, y cómo afecta esta condición a los costes. De momento, los gestores y equipos de operación y mantenimiento disponen ya de los primeros resultados de BigER. El resultado de todo lo anterior será una nueva serie de herramientas muy evolucionadas con las que mejorar la eficiencia operativa de estas infraestructuras.
La eficiencia operativa se puede mejorar, por ejemplo, detectando los fallos o incidencias antes de que se produzcan. Incidencias como la desconexión de un grupo de paneles solares o el bloqueo del seguidor de uno de ellos. Eventos como estos pueden pasar desapercibidos. Sin embargo, si se sabe de antemano cuándo y por qué va a fallar un elemento, se pueden optimizar las tareas de mantenimiento como, por ejemplo, la limpieza de los paneles fotovoltaicos. El resultado de lo anterior, es que la disponibilidad de los elementos de generación aumenta y se limitan los costes de operación.
Se trata, al final, de que los gestores puedan tomar decisiones más rápidas y acertadas
Lo cierto es que gestionar carteras de activos, de diferente tecnología y cada vez más numerosos, al tiempo que se reducen los costes, es un reto. Los gestores demandan herramientas analíticas fiables, que sean capaces de procesar y analizar una ingente cantidad de información, y que recomienden cómo actuar en cada caso. Se trata, al final, de que puedan tomar decisiones más rápidas y acertadas. Y aquí es donde entra BigER.
Este no es el único proyecto de inteligencia artificial aplicada a las renovables en el que participa Isotrol. La empresa se ha convertido en un referente a la hora de aplicar esta tecnología. Un ejemplo de esto es WinDIAG, cuyo objetivo es dar forma a una nueva generación de herramientas para predecir fallos en los aerogeneradores de los parques eólicos. O el proyecto AI4PV, centrado en desarrollar un gemelo digital de plantas fotovoltaicas.
BigER es una iniciativa financiada por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo dentro del programa de apoyo a las AEI para contribuir a la mejora de la competitividad de la industria española; y cuenta con el apoyo de la Unión Europea a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
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